Un año más, y ya son diez, la World Photography Organisation convoca a fotógrafos de todo el mundo a participar en el concurso que se ha ganado la etiqueta de «más grande del mundo» donde los aficionados y profesionales de todo el mundo se darán cita para competir no solo por los premios, sino también por estar en una de las exposiciones de fotografía que más visitantes recibe que se celebra en el Somerset House de Londres.
La World Photography Organisation es una plataforma global para iniciativas fotográficas que está presente en más de 180 países. El año pasado los Sony World Photography Awards superaron su propio record de participación con 230.103 imágenes de 186 países. El premio al Fotógrafo del año fue para el fotoperiodista iraní Asghar Khamseh, y el de Fotógrafo del año del concurso Abierto para Kei Nomiyama, de Japón y Pedro Díaz Molins ganó el premio en la categoría de «fotografía mejorada».
Cuando este año le han pedido a los jueces que aconsejen a los participantes de esta edición Russ O’Connell a dicho: “Quiero que me deslumbren con un retrato o una imagen que invoque inmediatamente una respuesta emocional, no quiero ver pastiches de retratos famosos ni imitaciones del estilo de fotógrafos del pasado”, no sabemos si es una pista sobre lo que van a valorar los jueces este año, pero ofrece un diálogo en torno a lo que no debe presentarse, quizá fruto del hartazgo generalizado de los jueces a recibir fotos sin alma que pretender copiar lo que ya hicieron otros.
Last modified: 5 julio, 2017